Beneficios de vivir “conectado” con la naturaleza.

El Descubrimiento de Clint Ober
Clint Ober es el responsable de investigar y redescubrir los beneficios de vivir “conectado” con la naturaleza. En sus investigaciones observo que los animales no experimentaban los mismos efectos adversos que los humanos cuando se hallaban expuestos a campos electromagnéticos.
“Estos animales no llevaban zapatos ni dormían en camas aisladas de la naturaleza” y apunta “ellos estaban ‘conectados con la tierra’ “Los electrones libres y las frecuencias circadianas que se absorben al tocar a la Madre Tierra neutralizan los radicales libres y reducen los niveles de cortisol (hormona precursora del estrés) en el cuerpo, sincronizan nuestro reloj biológico con el de la tierra y ayudan a reducir el daño inflamatorio causado por los radicales libres a las células.
Clint observo que el uso de zapatos sintéticos no ayudaba a promover una conexión natural con la tierra de echo interfería con esta y es entonces cuando el empezó a cuestionarse si esto podría estar afectando nuestra salud. Se dedico a investigar y desarrollo un sistema casero que iba conectado con un cable desde su cama, saliendo por la ventana y que iba conectado a la tierra y se dio cuenta que esta conexión era eléctricamente equivalente a dormir conectado a la tierra.
Después de consultar a varios científicos de la UCLA, Clint empezó un estudio científico en el cual el resultado demostró que de sesenta personas con problemas de salud, dolor y rigidez, treinta de ellos – los que durmieron con la versión de la “cama conectada a la tierra” por treinta días — notaron que se dormían mas rápido, se despertaban sintiéndose descansados, redujeron sus rigideces, redujeron el dolor crónico de espalda y de articulaciones y mejoraron su salud en general.
Yo personalmente he experimentado en mis clases de yoga como mis estudiantes incrementan sus niveles de relajación y concentración cuando practicamos el yoga en la naturaleza, tocando directamente el suelo. La piel brilla mas –prácticamente enseguida– los ojos están más abiertos y aumenta su brillo. También es bastante notoria la sensación de energía subiendo desde las plantas de los pies hacia arriba por la espina dorsal.
Cuando nuestra piel está en contacto con la naturaleza; tocando un árbol, la tierra, el agua o una piedra, nuestro cuerpo absorbe millones de electrones libres. Recibimos más antioxidantes de los que podríamos recibir de la comida o de un suplemento y nos liberamos de todas las cargas electromagnéticas acumuladas en nuestro cuerpo. Reducimos la inflamación, dolor, estrés, neutralizamos los radicales libres, se normalizan los niveles de cortisol y mejora nuestro sueño y nuestra salud en general. Caminar descalzo y estar en contacto con la naturaleza es gratis y es increíblemente beneficioso.